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martes, 14 de abril de 2015

ALIMENTACIÓN EN LOS EQUINOS

ALIMENTACIÓN EN LOS EQUINOS: PRIMERA PARTE
La Alimentación en los equinos es sin duda uno de los factores fundamentales en el manejo animal, para cumplir con las siguientes funciones:
- Mantener la Vida.
- Reproducción de las Especies.
- Crecimiento y Desarrollo.
- Salud.
Todos los animales necesitan en su alimentación, un conjunto de sustancias para satisfacer las necesidades de su organismo. Estos elementos son:
- Agua, Proteínas, Grasas, Hidratos de Carbono, Minerales y Vitaminas.
- Una Alimentación adecuada deberá tener en cuenta: Las Necesidades Propias de los Caballos.
Las exigencias particulares, estas se encuentran directamente relacionadas con los requerimientos de aquellos nutrientes calculados y recomendados para los distintos tipos de individuos: Yeguas Reproductoras (Vacías, Preñadas y en Lactancia), Padrillos, en crecimiento, Deporte, Trabajo, etc.
En todo planteo nutricional, no podemos olvidarnos de las características fisiológicas de los equinos, las cuales comprenden una masticación lenta y cuidadosa de los alimentos, un estomago de pequeña capacidad que tiene que vaciarse varias veces al día, un intestino delgado donde se realiza la digestión enzimática, y un intestino grueso, asiento del ataque microbiano y fermentativo de los alimentos.
Las necesidades o requerimientos se pueden dividir en dos grandes grupos:
- Mantenimiento: Esta es una condición de equilibrio, caracterizada por que el animal no gana ni pierde peso, estando en función del peso vivo del animal. El alimento ingerido es utilizado para mantener su metabolismo, Para la reparación y formación de células y tejidos, y para mantenimiento de su temperatura corporal.
- Producción: Están incluidos, la Reproducción, Gestación, Lactancia, el Crecimiento, el Trabajo y el Engorde. En esta etapa los requerimientos dependerán del tipo de producción y de la intensidad con la que se realice la misma.
En condiciones prácticas, el racionamiento reviste diferentes aspectos si se trata, por ejemplo: de un caballo de uso rural o deportivo, ya que las exigencias energéticas en ambos casos son distintas. El contenido de Energía de la ración, debe estar, siempre, en proporción con:
- La Duración del trabajo, Deporte, etc.
- La intensidad de la Actividad Desarrollada.
Las necesidades de un caballo en mantenimiento pueden ser satisfechas mediante un potrero con una buena pastura, siendo el mejor ejemplo el caballo que se encuentra en el campo sin realizar ninguna actividad. La riqueza de los elementos nutritivos aportados por la pastura dependerá de la zona, de la época del año, y del ciclo de producción de las mismas, generalmente las pasturas naturales son bien utilizadas por los equinos, y cuando son de buena calidad aportan una importante cantidad de proteínas.
En cambio en el caso de los animales con mayores necesidades nutritivas como es el crecimiento, la gestación o la lactancia, o en aquellos caballos que efectúan un trabajo intenso o sometidos a una actividad deportiva, la pastura o el fardo no alcanzan para satisfacer esas exigencias, por lo tanto requieren la incorporación a la dieta de una o varias sustancias que le permitan completar sus necesidades alimenticias. Se les debe añadir un elemento adicional llamado suplemento o concentrado con la finalidad de transformar esa nutrición incompleta en algo integro y equilibrado de acuerdo a sus requerimientos.
El caballo que realiza una actividad física (Deporte, Trabajo, Carruajes, Endurance, etc.) Debe ser considerado como un atleta, este encuentra aumentadas sus necesidades energéticas, vitamínicas y minerales, por lo tanto requiere un aporte alimenticio "extra" o diferente de aquel que está en reposo. Al requerir mayores exigencias nutritivas, la administración de una pastura o heno no alcanza para satisfacerlo, por lo tanto se le debe dar suplemento o concentrado, como por ejemplo granos.
La relación expresada en porcentaje y en cantidad administrada, entre el forraje y el concentrado proporcionado es variable y dependerá de la intensidad de la actividad desarrollada, de manera que a mayor actividad física mayor cantidad de concentrado incorporado para su nutrición.
En el padrillo que realiza su servicio reproductivo en un sistema extensivo a campo, los aportes nutricionales no varían mayormente, pues se alimentara de pasturas en un optimo estado de esplendor por la época, pero deberá comenzar la temporada de servicios en un excelente estado general.
En cambio el padrillo destinado a la cría intensiva, o sea aquella que demanda mayor mano de obra, y donde el reproductor se encuentra alojado en boxes, generalmente se lo suplementa con una mayor cantidad de granos, al cual se le adicionan vitaminas y minerales.
En la yegua la diferente alimentación que reciben, está directamente relacionada con el momento que demanda mayores necesidades nutritivas: La Gestación y Lactación. Se le suele administrar un suplemento alimenticio, en el último tercio de la gestación (coincidiendo esta época con el mayor crecimiento del feto) y durante la lactación. Es importante destacar que un menor aporte proteico en la yegua en lactación, afecta la normal producción de leche.
Las necesidades del potrillo lactante son paulatinas, pues comenzara a comer pastura y con el tiempo se complementara con granos o ración balanceada, con los respectivos minerales y proteínas para favorecer su crecimiento.
A partir del destete comienza una etapa de mayores exigencias nutritivas acompañada por el mayor crecimiento de su aparato óseo y muscular, que deben ser satisfechas dentro de u estricto equilibrio, para evitar sobrepesos o excesos de energía y proteínas que también suelen ser contraproducentes.
Es conveniente recordar que durante el crecimiento, las necesidades nutritivas se encuentran estrechamente relacionadas con la edad del potrillo y con su capacidad genética de crecimiento.
El desarrollo del esqueleto del potrillo en crecimiento es vital para su futuro, por eso las necesidades de minerales (la ingesta excesiva puede ser tan perjudicial como su déficit) y las necesidades de proteínas son mayores que en un animal adulto.
Las particularidades anatómicas y fisiológicas del aparto digestivo del caballo de cualquier edad que fueron descriptas anteriormente, lo predisponen a problemas de transito alimenticio y alteraciones como: Cólicos, diarreas, indigestiones, infosuras, etc.
En el plano de la salud, las enfermedades causadas por los desordenes alimenticios cubren un espectro muy amplio, destacándose:
- Alteraciones y Desordenes Digestivos.
- Anomalías del Tejido Óseo.
- Retraso en el Crecimiento.
- Trastornos en la Reproducción.
- Disminución de la Resistencia de Enfermedades.
- Perdidas de Peso.
- Disminución del Rendimiento.
- Alteraciones en el Estado General y en el Manto Piloso.

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